Era junio de 2016 cuando saltaba la noticia: “El Doctor Music Festival vuelve en 2019 para celebrar su Reincarnation Edition”

Han pasado algo más de dos años desde que se produjera este anuncio y desde entonces no han cesado los preparativos para celebrar lo que será el mejor festival de la historia. El camino recorrido hasta hoy ha sido largo, pero finalmente, un año antes de que abra sus puertas, la organización del DMF ha colocado la primera piedra. Desde ayer un gran menhir sagrado se erige en el Valle como símbolo de compromiso, ocupando un papel destacado en su función de expansor de las energías del lugar.

La celebración de los actos que han tenido lugar durante el 23 y 24 de julio han contado con la participación de Quimi Portet, que ha ofrecido un maravilloso concierto a los allí convocados, y de la Asociación La Xicoia, que preparó una fantástica degustación de productos locales y que también estará presente en el festival como muestra de nuestro compromiso con la sostenibilidad y la soberanía alimentaria.

Igualmente, hemos contado con la presencia de Albert Adrià que ya anunció su participación gastronómica en el festival, con prensa destacada y con las principales instituciones implicadas en este proyecto.

Las fechas de estos actos no han sido elegidas al azar. La noche del 23 de julio de 2018, las estrellas del cielo de Escalarre se encontraban en la misma posición que la primera noche del próximo Doctor Music Festival, el 12 de julio de 2019.

Los escenarios aún no están montados, los miles de personas del público todavía no han llegado, los artistas aún no están ahí para entregarnos toda su fuerza y su música.

Sin embargo, quedan exactamente 12 lunas para que todo comience. En esa noche tan especial ha tenido lugar la reconexión del espacio del Doctor Music Festival.

El momento más mágico de la ceremonia ha sido la instalación de un menhir sagrado que actúa como centro de las energías que confluyen en el valle.

El prestigioso experto en Geobiología Mariano Bueno y la arquitecta Assumpció Vilaseca, especializada en Geometría Sagrada, han sido los encargados de dirigir la construcción de este santuario de energías naturales.

En el valle del festival, se ha buscado el punto exacto que más dinamiza y mejora el espacio que le rodea. Es en este punto donde se ha erigido el menhir, que actúa como una antena para expandir la energía del lugar. El punto elegido dialoga con los edificios sagrados del valle: las iglesias de Sant Martí d’Escalarre y Santa Maria d’Àneu. Tomando como referencia el centro de esta iglesia, funcionará como un reloj astronómico, marcando la salida del Sol en el solsticio de verano y durante los amaneceres del festival.

Además, las 104 tiendas en las que pasamos la noche iniciática del 23 de julio se dispusieron en puntos estratégicamente elegidos para activar el mandala del lugar. La geometría de sus círculos, cuadrados, rectángulos, espacios y parrillas proporcionarán la unión y el equilibrio de las energías telúricas, cósmicas y geológicas del lugar.

La reconexión del valle del Doctor Music Festival ha tenido lugar a cuatro niveles, que Mariano Bueno describe así:

“Se ha producido una reconexión entre el Cielo y la Tierra, entre las montañas y el valle, entre las Energías Cósmicas y las Terrestres, y a nivel humano, la reconexión de nuestro ser interior con las fuerzas y energías de la Naturaleza”.

Quedan 12 lunas para que comience la Reincarnation Edition del Doctor Music Festival. Que la energía del Cosmos nos guíe.